Las princesas también van en moto
PRÓLOGO Hermana, necesito tu ayuda. Quien tú ya sabes me está buscando. Digamos que le debo un poco de dinero, pero ahora mismo no puedo pagarle. ¿Podrías ayudarme? Tengo hasta las 12 de la noche de hoy. Reúnete con él en el acantilado que hay al final del camino roto que se encuentra al norte de…